De Barranco Fondo a la cascada del Confesionario

Nos dirigiremos por la carretera de Campodarbe hasta el punto en el que se encuentra el caserío de Mesón de Fuebla. A mano izquierda de la carretera, una pista nos acerca a lo que fueron Las Casas de Barranco Fondo, hoy en ruinas. Antes de llegar veremos, en una bifurcación de la pista, una construcción de nueva planta. Hay que seguir adelante, al frente, por la pista que presenta peor estado de conservación. Dependiendo del vehículo que llevemos, avanzaremos por ella hasta donde nos sea posible y salvaremos la distancia hasta las casas, andando.

Avistadas las ruinas de las Casas de Barranco Fondo, en la parte posterior, mirando al valle, encontraremos un rosal, una pequeña alberca y, entre flores silvestres, el nacimiento del río Sieste. A partir de este punto, si deseamos recorrer el cauce hasta la Cascada del Confesonario, deberemos seguir el cauce del mejor modo posible, puesto que no hay sendero definido.

Un detalle importante es tener en cuenta que hay que volver al punto de origen a por el vehículo. En total emplearemos unas 4 horas siendo conveniente llevar agua.

El espacio que vamos a atravesar es bosque de reforestación en su mayor parte. Tan sólo vamos a encontrar, como construcciones singulares, dos bordas junto a una era de gran superficie. Con un poco de suerte avistaremos algún águila culebrera y poco más.

Es un recorrido que merece la pena ejecutar. Debemos de hacerlo con calzado y ropa adecuada. No resulta duro, más bien lo contrario y es agradable por que se camina en todo momento entre pinos y arbustos que protegen al senderista, salvo los últimos metros en que el cauce se ensancha y caminamos sobre roca.